Mi pico de ansiedad llegó en diciembre, sintiéndome nerviosa, ansiosa en situaciones en las que nunca me había sentido así. Siempre he sido una persona muy positiva, y que no le da importancia a las cosas que no la tienen (desde mi punto de vista claro :-), como quedarme sin coche, sin trabajo, pérdidas materiales…). Siempre voy con el ‘todo tiene solución’ por delante. Pero porque lo creo así.

A partir de ese pico de ansiedad, todo cambió.

Sin embargo, a partir de esta experiencia todo cambió. Me agobiaba y me agitaba hablando con personas, en situaciones sociales, y sobre todo si me quedaba sola en casa, por miedo a encontrarme mal, lo que automáticamente activaba el proceso. Dejé de salir lejos de casa, y me costaba hasta hacer la compra. Llevaba tiempo dejando de hacer cosas por miedos no reconocidos.

Con el sistema encontré una SORPRESA

No imaginaba que me fuese a gustar tanto desde el principio. No solamente por el tema de la ansiedad, sino porque es muy acorde a cómo siento el mundo. Sentí que podía trabajar mi experiencia con mis miedos, pero sobre todo que podía «reencontrarme» y mejorar personal y espiritualmente. Vosotros vais más allá de la ansiedad. En realidad es lo que me hacía falta.

Hice muchos descubrimientos poderosos.

También me di cuenta de cuántas cosas y qué cosas pasaban por mi cabeza sin siquiera darme cuenta.

Me encontré con muchos descubrimientos poderosos que me ayudan en cualquier situación que se pueda presentar (incluida una pandemia y una cuarentena, quién lo iba a decir).

Me encontré con muchos descubrimientos poderosos que me ayudan en cualquier situación que se pueda presentar (incluida una pandemia y una cuarentena, quién lo iba a decir).

He hecho cosas que antes no habría podido

Conseguí salir más de casa, hasta ir al super sin pensar en ello y estando tranquila. Me podía quedar sola en casa pero seguía necesitando saber a qué hora volverían a casa. También fui a algún evento social, disfrutándolo, cerca de casa, al que hacía un mes no habría podido.

Por lo tanto, avancé mucho. No solo por el avance en sí, si no por lo que podía haber empeorado si no llego a hacer el sistema y conseguir parar esos pensamientos, o al menos reconocerlos. Por ello os doy las gracias por compartir, de verdad.

Cuando tuve que empezar nuevo trabajo hace tres semanas los dos primeros días me costaron, normal, pero después fue un gusto.

Por fin estoy haciendo lo que me gusta, y lo noto en mi día a día

Dejaron de aparecer los pensamientos sobre la ansiedad a todas horas. Y ahora estoy de cuarentena. Ayer tuve fiebre y dolor de cabeza, así que me recomendaron aislamiento en casa en una habitación aparte. Hoy estoy bien.

Sorprendentemente estaba más nerviosa cuando no tenía síntomas, tratando de evitar el contagio, limpiando todo con lejía. Ahora que es probable estoy más relajada, es lo que hay, y a pasarlo lo mejor posible.

Lo que más me gusta de vuestro sistema es la sencillez

Permite que todo sea sencillo y autónomo. Primera lección: una aplicación sencilla, con todos los audios, donde tienes que tener la paciencia para no escucharlos del tirón con el absolutista ansioso a tope. Eso me gustó, me hizo trabajar mi impaciencia, y eso ayuda.

Además, me gusta que comparta la visión y experiencia de una psicóloga y la de una persona que sufrió con ansiedad

Rocío e Iñigo se complementan bien.

Además me resultó fácil que el proceso sea a través de una aplicación móvil (o web), y la facilidad a la hora de resolver cualquier incidencia, etc.

Recomiendo este sistema porque creo que funciona a muchos niveles, para despertar de actitudes y pensamientos no reconocidos, que es lo que te ayuda a cambiar tu experiencia con el mundo.

Volveré a repasarlo, creo que me vendrá muy bien reforzar y seguir interiorizando todo. Me está viniendo muy muy bien en estos momentos que estamos viviendo de cuarentena. Estoy segura de que saldremos cambiados todos para mejor, valorando lo realmente importante en nuestras vidas, en general estábamos muy perdidos.

GRACIAS por compartir vuestro camino con el mío. Ha sido una suerte.