He tenido algunos conflictos con empresas por apoyar a un cliente que está de baja laboral en fase de recuperación.
El seguro presiona al médico, el médico presiona al paciente, el paciente presiona a su sistema nervioso.
Todavía tengo clientes a los que les da vergüenza poner en su baja que tienen ansiedad.
No quieren que les etiqueten como locos o débiles.
«Posiblemente tu jefe sea también cliente mío», suelo contestarles.
Claro, el que se rompe una rodilla no tiene fama de tener rodillas débiles. Además tiene una radiografía que justifica su dolor y su necesidad de reposar.
Los animales cuando están cansados cogen y se tumban. Nadie suele exigirles no hacerlo.
En cambio parece que los humanos hemos perdido el derecho al descanso. El derecho al reposo. No siempre sucede pero el sistema en ocasiones ha de ser revisado.
Peeeero….
No quiero que esto sirva para fomentar el victimismo. Hay que trabajar, hay que responsabilizarse, hay que darlo todo.
Y dándote cuenta de si en realidad estás dando más de lo que te piden.
Porque a veces también es ese el problema.
Culpar a lo de fuera no es la solución.
Empieza a decir no, empieza a distinguir cuándo algo es suficientemente perfecto, empieza a dominar tu mente para que no te quite más energía de la que te están pidiendo.
Tú tienes el poder de la situación.
Mis sistemas no sólo sirven para eliminar la ansiedad, sino para aprender a vivir con la tensión mínima necesaria para funcionar con éxito.
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– Rocío