La recuperación tiene más de quitar que de poner.
La escultura, decía Da Vinci, procede per via di levare: quitando.
Quitando de la piedra la masa que encubre la superficie de la estatua en ella contenida.
Así emergió el David de Miguel Ángel.
Ese hombre tan imponente que en su día fue un bloque de mármol.
Tú y yo estamos en un trabajo de esculpir.
Sacamos a relucir a la persona sana, fuerte y segura que esperaba ser descubierta bajo un manto de confusión mental y corporal.
El proceso comienza por auto-percibirse.
Uy, esto es lo más importante.
Algunas personas me escriben preocupadas porque cuando empiezan a practicar mis sistemas sienten que les sube la ansiedad.
Sucede porque empiezan a conectar con sensaciones de las que estaban huyendo.
Intentando huir, corrijo.
Porque no sólo no lo conseguían, sino que las amplificaban y empoderaban sin darse cuenta.
Auto-percibirse no es un esfuerzo.
Es dejar de hacer un esfuerzo por no percibirse.
Permites que bajen las resistencias que curiosamente estaban alimentando al bicho.
Te das cuenta de que las sensaciones te caben.
Dejas de luchar contra ellas y de repente, todo cambia.
Con el proceso que te propongo comienza la decatexis. Se disuelven las asociaciones equivocadas entre síntomas y pensamientos. Y es un proceso natural, que sucede solo. Simplemente hay que facilitárselo al cuerpo y a la mente.
Sin darte cuenta, por tu condición de humano, se pusieron en marcha una serie de mecanismos que acababan generando tensión.
Los síntomas no son más que tensión.
Y tensión ante la tensión, más y más tensión.
Combustible.
Una vez activados esos mecanismos, y sin tener la comprensión adecuada, es fácil caer en el malentendido que mantiene el sistema en esa dirección. Si le dejas, sigue la inercia.
Cuando por fin inviertes esos mismos mecanismos, no añadiendo, sino quitando, el sistema cambia el rumbo y lo natural es que tienda hacia la calma.
El cuerpo está más cómodo en calma que en tensión. Es su estado óptimo, en el que ahorra energía y para el que fue diseñado.
Dale a tu cuerpo las directrices adecuadas para que recupere su equilibrio innato haciendo clic aquí
Un abrazo,