Empiezo hoy diciéndote que te admiro.
No hay nada más admirable en un ser humano que querer superarse a si mismo.
Y sé que estás aquí conmigo por eso.
Si alguna vez te culpas por tener ansiedad, sal de ahí.
Cada persona siempre hace lo que mejor sabe y puede en cada momento.
Nadie te enseñó a ser perfecto, ni falta que te hace.
Recuerda que tus emociones nunca son el problema. Tu rabia te saca adelante. Tu miedo te enseña por dónde ir y no ir. Tu tristeza te ayuda a parar, reflexionar y descansar.
La reacción ante esas emociones es lo que complica las cosas.
¿Te culpas por sentir miedo?
¿Te irrita estar triste?
¿Te da miedo sentir tristeza?
A veces tenemos tal matrix de sensaciones, pensamientos y sentimientos que necesitamos un poco de orden y claridad.
Conectar con las emociones de forma limpia.
Separarlas de condicionamientos y creencias, que es lo que las enturbia.
Y así es como iremos saliendo del malentendido que es la ansiedad.
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Un abrazo,