Venga, échale estómago y decide.
Dile a tu Comité de Expertos Interno que se calle un poco.
¡Silencio!
Vale ya.
A-C-T-Ú-A
No necesitas llevar ante Tribunal tanta decisión.
Que sí, que toda opción tiene estos pros y estos contras. Que puedes darle 400 vueltas más para ver si sientes más seguridad o certeza.
Te aseguro que ya lo has pensado lo suficiente.
El Comité siempre tiene hambre de más.
De más argumentos, de más datos, de más confirmaciones externas.
Están acorralando al gran líder, seguro y carismático, que llevas dentro.
A veces ayudan, pero no se dan cuenta de que los problemas se resuelven el la vida real, no en la sala de juntas mental.
Agradece su labor, pero hazles saber que tienen que adaptarse al mundo en el que vives.
Y recuérdales que tienes muchos retos que cumplir.
Si por ellos fuera, estarías cuál filósofo griego tumbado en la salida del templo, mirando las estrellas y preguntándote «¿y sis?» hasta el amanecer.
Lo que he visto con mis sistemas https://hermanoslacasa.com/sistemas/ es que a medida que estás aumentando tu confianza interna, las decisiones son más fáciles de tomar, porque tu cuerpo y tu mente saben que venga lo que venga, podrás resolverlo.
Vivir en la ambivalencia es fuente de ansiedad constante.
A estas alturas tenemos más que sabido que los errores son aprendizajes y los fracasos, oportunidades.
¿Hacen falta más películas, libros, historias, páginas, frases que lo demuestren?
¡Venga ya!
¡Vamos amig@!
Te invito a conectar con tu coraje.
Un abrazo,
Rocío Lacasa